18 Nov Eduardo Hebel W., rector UFRO: “La inclusión como pilar educativo en la UFRO”
Hace ya algunos años que las instituciones de educación están hablando sobre la inclusión. Un concepto que abarca mucho y que sigue en pleno desarrollo.
Según la UNESCO, la inclusión es un enfoque que responde positivamente a la diversidad de las personas y a las diferencias individuales. Se entiende, además, que la diversidad no es un problema, sino una oportunidad para el enriquecimiento de la sociedad a través de la activa participación en la vida familiar, en la educación, en el trabajo y en general, en todos los procesos sociales, culturales y en las comunidades. Independientemente de sus características y/o habilidades, la inclusión busca que todos los individuos puedan tener las mismas posibilidades de desarrollo y acceso a oportunidades en una sociedad.
Esta definición data de 2005. Casi 20 años después, las instituciones de diversas áreas y de la sociedad civil organizada, seguimos apostando por la inclusión en nuestros espacios.
En materia de universidades, se considera como universidad inclusiva aquella que es capaz de ayudar a superar los miedos e inseguridades que una persona diferente siente.
Desde la UFRO somos conscientes de que este es un tema transversal, prioritario y muy sensible, del cual hemos decidido hacernos cargo: estamos en pleno proceso de construcción de una política de inclusión que integrará diversas miradas y sectores, mediante una comisión triestamental y mecanismos de consulta. Es, además, uno de los pilares de nuestro modelo educativo y tiene como principales áreas de trabajo la discapacidad y neurodiversidad; diversidades sexo-genéricas; etnia y migrantes; vulnerabilidad, talento académico y personas mayores.
Lo anterior, responde a un compromiso que tenemos como universidad, porque cuando hablamos de educación inclusiva, nos referimos a una educación para todos y todas, que esté pensada para un amplio conjunto de personas. Se trata de mirar más allá y derribar nuestras propias barreras, sesgos y juicios, para mejorar todo lo que podamos mejorar, en virtud de una convivencia armoniosa y en sintonía con nuestro entorno.
Ya no es solo apertura y acceso, es ver la inclusión como una condición que, si bien se enfoca en el desarrollo del estudiante, supone eliminar todo discurso asistencial que, hasta ahora, solo ha profundizado la diferencia.
Fuente: